Para que implementen de manera urgente un Programa Integral de Atención a las Víctimas de la Violencia Familiar y de Género en el Estado de Nuevo León, tanto física, psicológica y verbalmente, el Congreso del Estado de Nuevo León aprobó enviar un exhorto al Gobernador, Jaime Rodríguez y al Procurador de Justicia, Bernardo González Garza.

La diputada Laura Paula López propuso una reestructuración de los Centros de Orientación y Denuncia de la Procuraduría de Justicia de la entidad para que puedan atender correctamente y agilizar los casos de Violencia Familiar y Contra la Mujer.

"En días recientes, medios de la localidad han publicado una serie de reportajes en donde se evidencia que la Procuraduría de Justicia Estatal carece de capacidad de respuesta y de personal sensibilizado para atender las denuncias de violencia familiar, así coincidieron organizaciones civiles que tienen más de 20 años trabajando en esta problemática", expresó la diputada.

"No existen programas adecuados de prevención en escuelas, centros de salud y comunitarios que evitarían que la violencia llegara a extremos como el asesinato de un integrante de la familia".

"Otra situación muy grave es que 7 de cada 10 mujeres que denuncian son citadas a audiencias sin el apoyo de un asesor jurídico, por falta de personal, ya que solamente existen dos abogados fungiendo como asesores en todo el estado".

"Esta figura existe desde el 2016 con el nuevo Sistema de Justicia Penal, para que las víctimas tengan en el proceso a una persona que las oriente y les explique sus derechos, sin embargo, esto no sucede".

La diputada López Sánchez agregó que lo peor del caso es cuando una mujer se anima a presentar una denuncia tiene que sufrir aun peor con el calvario de las autoridades que no tienen ni la sensibilidad ni la capacitación para atenderlas adecuadamente.

"Como mujer y como representante de la sociedad estoy indignada por la falta de una política integral para la atención a este tipo de casos y exijo que este Gobierno tome cartas en el asunto urgentemente, no podemos permitir que más mujeres sean golpeadas o incluso que pierdan la vida".

Cabe mencionar que entre el 2010 y el 2016, las denuncias por violencia familiar en Nuevo León aumentaron 125 por ciento, al pasar de 7 mil 910 a 17 mil 773 y las autoridades no han sabido responder ante dicha alza.

A favor del exhorto se pronunciaron los diputados Samuel García y Arturo Salinas.