Grupo Legislativo
Partido Acción Nacional

Autor: Grupo Legislativo PAN

Por: Héctor Briones López

 

El no tener ahorros suficientes y carecer de un trabajo estable son dos de los motivos más frecuentes de negación de préstamos, especialmente entre jóvenes de 18 y 29 años.

Según el comparador, la principal razón esgrimida por los bancos para desestimar solicitudes fue la no adecuación del producto solicitado a la política de la entidad. Por otra parte, un 27% de los clientes a los que se denegó dice haber recibido esta respuesta por parte de la entidad financiera.

Dentro de este contexto, los problemas económico-financieros con los que normalmente se topan los emprendedores Mipymes de su empresa son:

-          Insolvencia, viven del diario, no tienen soporte económico.

-          Mala gestión en el flujo de caja, desorden con el manejo del efectivo.

 

-          Difícil acceso a créditos bancarios porque normalmente no tienen ni solvencia, ni activos inmovilizados para respaldar deudas.

-          Las Mipymes que logran acceder a créditos bancarios es porque han logrado sostenerse por más de 5 años en el mercado y tienen estados financieros sólidos e igual con gran dificultad pagan mes a mes los intereses de crédito.

Aún es bajo el acceso al crédito para los emprendedores y es necesario impulsar mecanismos de financiamiento más eficientes para apoyar el crecimiento de las empresas

En primer lugar las PYMES son percibidas como entidades de alto riesgo, por lo que los bancos prefieren desviar sus recursos a organizaciones de mayor tamaño que puedan cumplir con sus obligaciones

Frente a esta situación tan difícil de falta de garantías por parte de la empresa, de falta de crédito por parte del sector financiero y de falta de políticas aplicables a nuestra realidad

Cada día hay más empresarias que rompen con paradigmas sociales para incorporarse al mundo de los negocios, nicho que durante años estuvo dominado por los hombres: los  datos del Banco de Información Estadística (BIE) del INEGI revelan que 2.6% de las mujeres económicamente activas son empleadoras, en contraste con la cifra de 2005, cuando era  sólo 1.8 por ciento.

La participación de las mujeres en la fuerza laboral ha tenido logros significativos y ha ido acortando la brecha de género en el empleo; sin embargo, ésta sigue siendo considerable. Aún existe segregación por sector y ocupación, así como una aparente falta de movilidad que podría tener costos significativos en términos de eficiencia y reducción de la pobreza.

Su incursión en el mundo empresarial les otorga mayor libertad para atender labores domésticas y de crianza y constituye una oportunidad para crecer y ascender que no suele darse en el sector privado formal.

Las empresarias no sólo generan ingresos, sino también crean nuevos puestos de trabajo y competencia entre los negocios, lo que redunda en mayor productividad y transferencia tecnológica. Las empresarias suelen ser innovadoras, además de aportar conocimientos y nuevas ideas a la economía, otro importante factor del crecimiento. Cada vez más, el apoyo a las empresarias es visto como una importante palanca para el desarrollo del sector privado.

Todavía quedan obstáculos: las mujeres tienen menos probabilidades de conseguir capacitación y servicios de desarrollo empresarial. Cuando existe capacitación en el mercado, normalmente se concentra en los roles tradicionales y las excluye de los sectores más productivos y de mayor crecimiento.

Por los motivos aquí expuestos  propusimos ante el Congreso Local y para que los jóvenes recién egresados de la Universidad y las madres solteras tengan mayor oportunidad de desarrollarse una iniciativa de reforma para la creación de un fondo especial y una incubadora de negocios.