Los integrantes de la  Comisión de Vigilancia del Congreso, sostuvieron la tarde de este martes,  una reunión de trabajo con el titular de la Auditoría Superior del Estado, Sergio Marenco Sánchez.

Marenco Sánchez, se presentó ante los legisladores, para responder a cada una de las cuestiones en las que se tenía alguna duda.

Rebeca Clouthier Carrillo, presidenta de la Comisión, dio la bienvenida al funcionario, solicitando, primeramente, informe el estatus en que se encuentran los entes fiscalizables.

Durante la presentación, el Auditor, hizo uso de la voz, para explicar la estructura, así como el organigrama que se tiene en la ASENL, además de cuestionar el desempeño del despacho encargado de fiscalizar sus cuentas.

Una vez que concluyó la presentación por parte del Auditor, los legisladores hicieron rondas de preguntas para que éste pudiera responder a sus dudas.

Al preguntarle a la presidenta de la Comisión sobre las conclusiones que se tuvieron en esta primera reunión, mencionó que el Auditor dejó a deber los montos a lo que ascienden las revisiones que ha realizado en estos dos años al frente de este órgano.

"Para nosotros es muy importante porque este ente nos cuesta 162 millones de pesos, creo que su trabajo debe de redituar al menos en generar el costo que implica para las arcas del Estado", dijo.

Agregó que en esta reunión se dieron cuenta que no existen criterios estipulados para escoger al despacho que se encargará de auditar a la Auditoría Superior.

"Creo que el que audita no puede escoger a quien lo audita, tiene que haber un mecanismo de selección de ese despacho", dijo Clouthier Carrillo.

Destacó que aunque la Comisión de Vigilancia, no está facultada para dictaminar, tiene entre sus atribuciones aprobar y evaluar el cumplimiento de los objetivos y metas del programa operativo anual del Órgano, así como fiscalizar, por sí o a través de servicios de auditoría externos, la debida aplicación de los recursos a cargo de éste.

Aseguró que se tendrán que hacer las modificaciones necesarias para darle "los dientes, a la Auditoría Superior para que su trabajo fructifique y valga la pena".